Rivera denuncia que unos «energúmenos» han hecho pintadas contra él en la tienda de su madre
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha denunciado este jueves pintadas contra él en una tienda que tiene su madre en Granollers, situada en la provincia de Barcelona. «Vamos a denunciar las pintadas de unos energúmenos», ha manifestado Rivera.
«Uno está en política para intentar arreglar las cosas, no para fastidiarle las cosas a tu familia», ha afirmado el líder de la formación naranja en una entrevista concedida a la Cadena Ser.
Este hecho se produce en mitad de una escalada de tensiones en Cataluña, después de que la Guardia Civil arrestara este miércoles a 14 altos cargos de la Generalitat e incautara casi 10 millones de papeles para el referéndum ilegal del 1-O.
«Que mis padres y mi familia tengan que sufrir las consecuencias de unos energúmenos que intimidan o coaccionan a su hijo por estar en política no lo vamos a permitir, lo vamos a denunciar», ha recalcado.
En el exterior del comercio se han colocado también varios carteles y rótulos que instan a votar ‘sí’ a la independencia de cara a la consulta ilegal del 1-O.
El dirigente del principal partido de la oposición en Cataluña ha lamentado que haya «una mayoría de catalanes» que también se encuentran en el punto de mira de los independentista con motivo del 1-O.
«Hay mucha gente que está estos días atemorizada, con preocupación, a mí me escriben decenas de personas cada día preguntándome qué va a pasar, esto es una locura», ha destacado.
Rivera ha aprovechado para mandarles «ánimos» y agradecerles que no se hayan «sumado a esta locura», en alusión a los enfrentamientos que protagonizaron este miércoles integrantes del partido antisistema de la CUP contra la Policía y la Guardia Civil con motivo de las detenciones.
«Hay una mayoría de catalanes que no están de acuerdo con este golpe, nos estarán escuchando muchos en mi tierra. Y quiero darles ánimos y también gracias por ser sensatos y no sumarse a la locura», ha sostenido.
Y es que el presidente del partido naranja espera que «ojalá veamos la luz al final del túnel, pero desde luego estas amenazas son intolerables».